No sé cuántos de vosotros habéis experimentado alguna vez vértigo. Quizás al subiros a un último piso, quizás en algún parque de atracciones. Lo cierto es que sin estar físicamente en las alturas tengo la misma sensación delante de esta hoja casi en blanco.  El vértigo es la sensación de miedo a precipitarse de una altura. Mejor explicado, imposible. Pueden preguntárselo a cualquier persona que decida emprender una idea.

Hace apenas seis meses SEN Global Salud comenzó a tomar forma. Comencé a subir una escalera sin saber muy bien si al llegar arriba me toparía con una pared en blanco. Me encontré en un punto en el que muchos de vosotros os encontrasteis al tomar grandes decisiones. Es el punto del “ahora o nunca”. Quizás sólo fue una excusa, quizás no era ahora y quizás nunca fuera nunca, lo cierto es que algo me impulsó y comencé a subir la escalera.

Las decisiones importantes tienen un punto de inflexión. Un punto de inflexión, en una función matemática, es un punto donde los valores de una función continua X pasan de un tipo de concavidad a otra. La curva “atraviesa” la tangente. Cuando te decides a emprender, también experimentas ese punto de inflexión. Es el segundo en el que comienzas a mirar en otra dirección, el momento en el que tu pasado solo importa en la medida en que te ha permitido ser lo que eres hoy. A partir de ese momento comienzas a pensar de otra manera y a poner toda tu energía en otra parte. Tus preocupaciones pero también tus ilusiones giran en torno a ese futuro proyecto esperanzador. ¡Y te quejas! Te quejas todos los días porque quién me habrá mandado a mi emprender. Y te lamentas porque lo has arriesgado todo, hasta lo que no te pertenece. Pero ya no hay vuelta atrás, es como si a cada peldaño que subes desapareciese la escalera que hay por debajo de ti y solo pudieses seguir ascendiendo porque ya te has metido de lleno.

Te das cuenta que la formación, los años o la experiencia son necesarios, pero lo que realmente importa son las ganas. Ganas de ponerle SENtido, y ganas de ponerle corazón a lo que haces. Y aprendes la más difícil de las lecciones: aprender a navegar en la incertidumbre. No sabes cómo van a ir las cosas. Has redactado un Plan de Empresa que posiblemente tires a la basura en los próximos meses porque poco de lo que has previsto tiene acogida en la realidad. Te tiemblan las piernas, tiembla la escalera, y a aquellos que están desde abajo insistiendo en que subas les miras pensando: “qué fácil es dar ánimos desde ahí abajo”  pero sigues subiendo porque sabes que esas personas confían en ti, te animan desde el corazón y no piensas defraudarles.

Y para todas esas personas va dirigido este post. A todos los que os habéis implicado de una u otra manera. A todos los profesionales que me han ayudado a convertir este sueño en realidad. A todos los que me habéis dado algún día la oportunidad de crecer y de confiar en mí. Al equipo que poco a poco va conformando SEN Global Salud por la ilusión que desprenden y por generar valor desde dentro. A mi familia y amigos porque sé que desde abajo sujetáis esta escalera.

Prometemos seguir creciendo con vosotros y hacer de este lugar, un espacio donde sentirse muy SEN.

GRACIAS

SEN Global Salud